"EL DESCANSO INFANTIL"
NECESIDADES INFANTILES:
EL DESCANSO
La falta de descanso y,
más específicamente, la falta de sueño puede desencadenar trastornos de
memoria, aprendizaje y atención en los niñ@s.
Instaurar la regulación del equilibrio entre actividad y sueño es, entre
otras, una de las tareas propias de la Educación Infantil.
La actividad y descanso,
por lo tanto, son fundamentales para una sana evolución del niñ@. Todas las
personas necesitan dedicar un determinado tiempo a la actividad como el
trabajo, los deberes, las clases, el deporte, etc, y otra cantidad de tiempo al
descanso (ocio, juegos sueño nocturno, etc...). La cantidad de tiempo dedicada
al descanso sirve para reponer la energía consumida durante el tiempo dedicado
a la actividad. Entre ambas cantidades de tiempo ha de existir un equilibrio
razonable.
No siempre el momento del
sueño es algo placentero, en algunas ocasiones l@s niñ@s como los adultos
pueden sufrir ciertas alteraciones que es importante conocer y saber cómo
debemos actuar.
Alteraciones
del sueño.
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Sonambulismo. Este
fenómeno suele producirse durante las primeras 4 horas del sueño y se trata de
la repetición automática de conductas aprendidas durante el día. La causa de
estos episodios se desconoce y suele desaparecer en la adolescencia. Como debemos
actuar, reconduciéndolo a la cama sin despertarlo , hablarle despacio con
frases sencillas.
-
Pesadillas. Se trata de
uno de los trastornos más frecuentes en la infancia. Podemos definirlo como un
sueño largo muy elaborado, con riqueza de detalles y que provoca en el niño una
fuerte sensación de ansiedad, miedo o terror.
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Terrores nocturnos. Son
menos frecuentes que las pesadillas, y es habitual que el niño se siente
bruscamente en la cama con cara de terror. A diferencia de lo que sucede en las
pesadillas, no suele despertarse fácilmente a pesar de los esfuerzos de otras
personas que tratan de sacarlo del trance desagradable
¿Cómo
debemos actuar?
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Sonambulismo:
Reconduciremos al afectad@ a la cama, hablándole despacio y con frases
sencillas. No pasa nada por despertarle pero es mejor no hacerlo.
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Pesadillas y Terrores
Nocturnos: Es aconsejable no despertar al afectado y esperar a que se le pase
el sueño, ya que terminará por despertarse por sí sólo o seguirá durmiendo
tranquilamente.
El establecimiento de
unos ritmos diarios de actividad y descanso en los que queden atendidas todas y
cada una de las necesidades básicas es la base para conseguir un clima de
seguridad, confianza y estabilidad para los más pequeños, favoreciendo la
capacidad de anticipar acontecimientos, la adquisición de estructuras
espacio-temporales, la capacidad de establecer relaciones, etc.
Es importante educar a
l@s niñ@s para la adquisición de hábitos de descanso y de sueño que les
permitan en el futuro llevar una vida saludable.
¿Cómo debe plantearse el momento de dormir?
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Se debe tener un horario controlado y estable,
que se adaptará a las necesidades del niñ@ para que desarrolle una actitud
favorable.
·
Se debe crear un ambiente adecuado, tranquilo y
acogedor, es importante que la habitación o el lugar donde duerme esté ordenada
y no tenga ningún adorno u objeto que pueda alterar o inquietar al niñ@.
·
No es conveniente que l@s niñ@s realicen
actividades que sean estimulantes momentos antes de ponerles a dormir, pueden
realizar alguna actividad tranquila que contribuya a relajarlo y no a
excitarlo. (Ejemplo: leer un cuento).
·
Se le debe de poner a dormir la siesta
inmediatamente después de comer, pues en este momento el niñ@ está más relajado
por el efecto de la ingestión de la comida. En la siesta siempre debe haber
algo de luz para diferenciar la noche y el día y no se debe evitar el ruido en
ese momento ya que siempre por el día hay sonido ambiente.
·
Por la noche es aconsejable ponerle a dormir
inmediatamente después de bañarle y darle la cena.
·
No olvidar que el momento de dormir es también un
momento de comunicación especial con cada niñ@. A todos les gusta que se le
dediquen unas palabras afectuosas, unas caricias, una canción.
Condiciones para
crear un buen ambiente.
·
Se debe mantener una intensidad de la luz baja,
pero sin dejar la habitación totalmente a oscuras y se debe bajar el nivel de
ruidos.
·
Hay que controlar la temperatura de la habitación
donde duerme. En ningún momento se permitirá que haga excesivo calor, pues el
niñ@ tiende a sudar y dificultará el que pueda dormirse de forma cómoda.
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Habituar al niñ@ a dormir en un lugar
determinado, y que pueda identificarlo fácilmente.
·
La habitación debe estar ordenada y si es posible
no debe tener nada que pueda distraer al niñ@ de dormirse.
¿Cuál debe ser la
actitud de los padres?
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Debe manifestar una actitud de serenidad. No se
trata de plantear la hora de dormir como una batalla o un conflicto de voluntades
entre el adulto y el niñ@. Las actitudes intolerantes y exigentes no
contribuyen a crear un clima adecuado de tranquilidad que es necesario para
dormir.
·
Es importante hablarle al niñ@, acariciarle y
tratar de mantener unos estrechos lazos afectivos para que se sienta seguro y
tranquilo.
·
Normalmente,
la mayor parte de l@s niñ@s acaban adaptando sus ritmos.